15 y 16 de febrero.

Viernes, 15 de febrero.

(Adjunto el artículo que escribí para el periódico La voz de Castelldefels)

El viernes, 15 de febrero, la agrupación del PSC de Castelldefels recibió la visita de Xavier Marín, director de la ESCOLA DE FORMACIÓ XAVIER SOTO, escuela dedicada a formar políticamente de los militantes socialistas de toda Catalunya; de hecho es tal la apuesta por la formación de este partido, el PSC, que uno de los cursos que esta escuela oferta ha acabado materializándose en un postgrado (Postgrau en Lideratge per a la Gestió Política i Social), impartido en la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB).
Xavier Marín llevó a cabo una conferencia referida a la diferencia real entre izquierda y derecha, a la que siguió un animado debate en el que participaron los militantes que asistieron al acto, además de todas aquellas personas que, interesadas por la temática, se presentaron en la agrupación socialista de Castelldefels. Unas setenta personas, entre militantes del PSC de Castelldefels, así como de la JSC (Joventut Socialista de Catalunya) de Castelldefels y de Viladecans, se sumaron a una de esas sesiones que revitalizan y refuerzan el posicionamiento ideológico y esos conceptos que, a veces, por básicos, quedan aparcados en pro de debates y cuestiones más puntuales.
Más allá del puro concepto, Xavier Marín recordó todos esos matices que definen las líneas de actuación de la izquierda, su voluntad de mejora social, su clara pretensión de igualdad, su carácter progresista, etc. En definitiva, todos aquellos factores que la diferencian de la derecha, que no deja de ser un mecanismo dado a perpetrar desigualdades y garantizar privilegios. En realidad, se trata de la opción de progreso; se trata de la voluntad de extender la prosperidad. Eso es la izquierda. Eso fue lo que nos recordó Xavier Marín.

Sábado, 16 de febrero

(Fotos del míting en L´H)

Realmente impresionante. Me impresionó mucho ver la Farga llena de gente hasta los topes. Y fue un placer escuchar a Felipe González... Sí, sí, ZP también genial, pero es que a Felipe no lo había visto ni lo había escuchado en directo; y os aseguro que vale la pena.

Alejandro Serrano S.